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Ya deberíamos dedicarnos de lleno a la clase de graduados de 2025

Francisco Miraval

La noticia me tomó por sorpresa, aunque no debería haber sido así, ya que, conociendo algo sobre educación, debería haberlo anticipado: la mayoría de los estudiantes en las escuelas de Estados Unidos, no escribe al nivel apropiado, según un reciente reporte difundido por la National Assessment Governing Board (NAGB).

El informe, basado en exámenes realizados en 2011 por 50.000 estudiantes de grados 8 y 12, revela que sólo el 24 por ciento de los estudiantes en cada uno de esos grados pudieron escribir ensayos bien desarrollados, organizados y con el idioma y la gramática apropiados. Otro 3 por ciento recibió un puntaje avanzado. El resto sólo tiene un dominio parcial de la habilidad de escribir.

La situación se complica aún más entre los estudiantes de grupos minoritarios, ya que existe una importante brecha académica (cercana al 10 por ciento del puntaje total) que separa a los estudiantes blancos de los estudiantes hispanos y afroamericanos. Esa brecha académica también afecta a los varones y a los alumnos provenientes de familias de bajos recursos. 

Para entender las verdaderas dimensiones de esta situación, se deben tener en cuenta dos factores adicionales: cuáles fueron los resultados de estos exámenes en años anteriores y qué se espera para el futuro.

Hace cinco años, el 33 por ciento de los alumnos de grado 8 y el 24 por ciento de grado 12 alcanzaron un nivel satisfactorio en escritura, es decir, tenían sólidas habilidades para escribir.

En otras palabras, la situación parece haber empeorado, pero se debe hacer una importante salvedad: hace cinco años, los exámenes eran con lápiz y papel, mientras que en 2011 por primera vez se usaron laptops para todos los exámenes. Por eso, advirtió NAGB, los resultados no se pueden comparar.

Sea como fuere, parece haber una indicación de que los estudiantes escriben mejor con lápiz y papel que con una computadora, principalmente, según explicó una asesora de NAGB, porque los estudiantes no usan la computadora para escribir textos, y, por lo tanto, desconocen el uso apropiado de un procesador de texto y de sus funciones, como el corrector de gramática y ortografía.

Si en la actualidad, a pesar de las nuevas tecnologías, sólo uno de cada cuatro estudiantes de secundaria escribe adecuadamente (y aún menos entre las minorías), ¿qué se puede esperar en el futuro?

Este mes, cuatro millones de niños en Estados Unidos comenzaron el jardín de infantes. Esos niños, por la fecha de su graduación de la escuela secundaria, se conocen como la Clase del 2025. ¿Por qué esta clase es diferente de las otras? Porque es la primera clase en la que la mayoría de los estudiantes no son blancos.

Dicho de otro modo, si todos estos niños llegasen a graduarse en 2025, será la primera vez en la que la mayoría de los graduados serán de grupos minoritarios. Para eliminar la brecha académica y tecnológica y para ayudarlos a construir su propio futuro, debemos desde ahora dedicarnos de lleno a esa clase, es decir, a nuestros propios hijos.

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