Menu
header photo

Project Vision 21

Transforming lives, renewing minds, cocreating the future

Blog Search

Blog Archive

Comments

There are currently no blog comments.

Reaparecen en nuevos ámbitos antiguos argumentos anti-inmigrantes

La semana pasada visité una conocida librería (perteneciente a una cadena nacional) para comprar un libro de Anthony De Mello. Temiendo que el dependiente de la librería no me entendiese, deletreé el apellido del autor que yo buscaba. Poco después, el dependiente me trajo un libro en español de “Antonio Romero” (que no sé quién es).

Le dije que ése no era el libro que yo quería y que el libro que le pedí había sido escrito en inglés. Con una falsa sonrisa, comenzó a decirme “Lo que pasa es que como usted es hispano…”

Nunca terminó la frase, pero tampoco hacía falta. Seguramente pensó que los hispanos solamente leen libros escritos por hispanos y en español y no pudo procesar en su cerebro que un latino pida un libro en inglés escrito por un sacerdote jesuita de la India.

Para él, como para muchos otros, lo mejor fue refugiarse en su estereotipo, en sus prejuicios, sin dejar que la realidad siquiera inquiete su cerrada manera de pensar.

También la semana pasada, por motivos profesionales, llamé a una conocida empresa de Denver. Como la recepcionista contestó el teléfono en español, comencé a hablar en ese idioma, pero me interrumpió diciéndome que no podía entenderme porque ella hablaba solamente inglés.

Cambié inmediatamente al inglés y empecé a explicar el motivo de mi llamado, pero me volvió a interrumpir diciéndome que no me entendía porque no había nadie que hablase español. Me dijo entonces que llamase en otro momento cuando hubiese una persona hispanoparlante disponible para atenderme.

Ni siquiera puede terminar de explicar la razón del llamado antes de escuchar “click”, probablemente porque la recepcionista no pudo superar su estereotipo de que los latinos solamente hablan español, y si hablan inglés lo hablan mal.

Otro ejemplo. Hace pocas semanas visité un prestigioso centro de altos estudios en Denver para recabar información sobre los requisitos de ingreso para pasar esa información a un grupo de adultos que, tras completar otros estudios, están ahora buscando la posibilidad de añadir una segunda carrera universitaria a su vida.

Tras coordinar la cita, cuando llegué a ese centro de altos estudios me sorprendí (pero no tanto) al enterarme que solamente me dejarían hablar con una persona hispana, pero no con la persona encargada de inscripciones para los programas de adultos.

Como yo soy latino, se asume (erróneamente, claro) que solamente leo libros latinos, que solamente hablo español y que solamente quiero hablar con otros latinos.

¿Por qué resurgen ahora estos estereotipos discriminatorios? Por la crisis económica y social, que hace que los grupos anti-inmigrantes acusen a los inmigrantes latinos, por medio de escritos ampliamente difundidos en Internet, de entre otras cosas provocar la falta de agua en Estados Unidos y de usar en exceso los servicios de salud mental en zonas rurales.

Y estas tonteras y muchas otras se seguirán repitiendo mientras haya gente más preocupada por ver la mancha en el parabrisas de su carro que por levantar la vista y ver el camino a recorrer.

Go Back